El Hospital José María Cabral y Báez, una de las principales instituciones de salud en Santiago, sigue brindando atención médica a ciudadanos haitianos sin exigirles documentación. Esta política refleja el compromiso del centro con la atención a todos los que lo necesiten, sin importar su nacionalidad o estatus migratorio.
En este sentido, Manasés Peña, director médico del hospital, explicó que la prioridad de la institución sigue siendo la salud de los pacientes. “Lo único que se requiere es que el paciente haitiano presente algún tipo de problema de salud para recibir atención. No hay barreras administrativas que interfieran en este proceso, por lo menos por el momento”, señaló Peña.
Este enfoque contrasta con la postura del presidente Luis Abinader, quien recientemente ha propuesto revisar la política de atención médica para los inmigrantes haitianos. El mandatario considera que los servicios públicos de salud no deben seguir siendo gratuitos para una población extranjera que representa una parte significativa de los pacientes en la red de salud pública del país. La propuesta ha generado un intenso debate en torno al acceso a la salud y los derechos de los inmigrantes, especialmente en un contexto de creciente número de ciudadanos haitianos que recurren al sistema de salud dominicano.