Hace 25 años que Georges no es utilizado para nombrar ningún ciclón tropical por la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Esto por la destrucción que provocó en República Dominicana, Haití, Cuba, Estados Unidos y las Islas de Sotavento.
La mañana del 22 de septiembre de 1998, Georges penetró a la costa este del país con categoría 3 con vientos máximos de hasta 200 kilómetros por hora. Sorprendió a una población que desconocía lo que le esperaba, debido a que la Defensa Civil no avisó a tiempo sobre su llegada y el impacto que tendría por su intensidad.
Con vientos arrasadores y lluvias diluvianas, el huracán Georges asoló franjas significativas de la geografía dominicana.
El saldo fue terrorífico, una enorme devastación material, 283 muertos (cifras extraoficiales establecen que los fallecidos sobrepasaron los miles), 1,053 heridos y 146 desaparecidos.
También, 263,724 damnificados. El fenómeno afectó a 112 puentes en todo el país, de los cuales solo 56 eran recuperables. Unos 1,435 centros educativos resultaron dañados y 60 mil viviendas en todo el país.