En los últimos días, cientos de haitianos han comenzado a retornar voluntariamente a su país a través del paso fronterizo de Dajabón, en el norte de la República Dominicana. Este flujo de personas ha sido notable, especialmente después de que en el día de ayer el presidente Luis Abinader anunciara nuevas medidas para endurecer las políticas contra la inmigración ilegal.
El retorno de estos migrantes responde a varios factores, como las políticas migratorias más estrictas y las difíciles condiciones económicas y sociales tanto en la República Dominicana como en Haití. A su vez, el aumento de operativos en zonas como Hoyo de Friusa y Mata Mosquito ha llevado a la detención de cientos de haitianos indocumentados.
Las autoridades locales, incluyendo organismos migratorios y fuerzas de seguridad, han estado vigilando el proceso para asegurar que el regreso sea ordenado y respetuoso de los derechos humanos. Durante el paso por la frontera, se ha brindado asistencia médica básica y apoyo logístico a los migrantes, con la colaboración de organizaciones humanitarias.
Este fenómeno sigue siendo vigilado de cerca tanto por las autoridades dominicanas como por organismos internacionales, debido al contexto humanitario y político que atraviesa Haití.