El senador Yván Lorenzo ha optado por no llevar adelante la denuncia ante organismos internacionales respecto al presunto hackeo del que aseguró ser víctima y que atribuyó al Gobierno. En medio de una controversia creciente, Lorenzo ha declarado que su enfoque se centrará en desafiar al presidente Abinader, desviando la atención hacia las acusaciones de uso indebido de tecnología por parte del Gobierno en apoyo a la campaña del Partido Revolucionario Moderno (PRM).
El senador Yván Lorenzo no denunciará ante organismos internacionales el presunto hackeo del que dijo que ha sido victima y de la que responsabilizó al Gobierno.
Lorenzo se encuentra bajo escrutinio público después de que saliera a la luz una carta supuestamente emitida desde su oficina, en la que solicitaba una entrevista con el periódico El Nuevo Herald para abordar las presuntas violaciones a los derechos humanos de indocumentados haitianos en el país, en línea con las denuncias de Amnistía Internacional. En respuesta, el senador ha afirmado que la responsabilidad recae en el presidente, instándolo a confirmar o negar la adquisición de equipos tecnológicos por parte de la Presidencia para favorecer al PRM.
“Mi enfoque no se desviará”, afirmó Lorenzo, “mantendré mi atención en garantizar que el candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana, Abel Martínez, compita en condiciones justas con el presidente Abinader”. Esta decisión del senador promete intensificar aún más la tensión política en el país, mientras se espera una respuesta por parte del Gobierno ante las acusaciones planteadas.