La madrugada del viernes, la Policía Nacional y el Ministerio Público ejecutaron la Operación Control, desmantelando una peligrosa red de crimen organizado en Navarrete, Santiago. Más de 250 agentes y 30 fiscales participaron en 41 allanamientos simultáneos, dirigidos contra actividades de microtráfico, sicariato y tráfico de armas.
La acción policial resultó en la detención de 31 individuos y la incautación de armas, vehículos, motocicletas, drogas, dinero y otros objetos relacionados con los delitos. La operación, preparada durante tres meses, ha sido un golpe significativo contra el crimen en la región.
Los cabecillas identificados, William Benedito Rivas, Silvio José Espinal Rivas y Amauri Muñoz Cruz, enfrentan ahora cargos por diversos delitos. El Ministerio Público, liderado por Osvaldo Bonilla, avanza en la fase de presentación del caso, prometiendo futuras actualizaciones sobre el proceso.