Según la definición del Centro de Operaciones de Emergencia (COE), los albergues o refugios, son un componente del sistema apoyo de emergenciaque están reservados para los evacuados. Dentro de los lugares que se han habilitado para refugiar a personas debido a los efectos elhuracán «Fiona», están, además, los centros educativos.
Y es precisamente el tema que en las redes sociales ha provocado un alud de comentarios en contra del Ministerio de Educación, entidad que emitió un comunicado en el que establece que los centros educativos deben ser la última opción de refugio.
Al respecto, el ministro de Educación, Ángel Hernández, explicó a este diario que así lo establece los reglamentos del COE.«Las escuelas son el último recurso de opación. Primero hay que verificar en la zona los posibles espacios que tienen de refugio o donde puedan alojarse las personas», explicó el funcionario.
Pese a las críticas, el titular de Educación informó que hasta el momento hay 21 escuelas de la zona este del país que están ocupadas con 480 personas.
Respecto a lo que especifíca el comunicado de Educación, de que «deben tratar de evitar que nuestros planteles se usen como centro de acogida». Hernández reiteró que «así lo establece el COE».
Se recuerda que dicha comunicación emitida por el Ministerio, provocó fuertes ataques en Twitter. El presidente de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), Eduardo Hidalgo, condenó la decisión de las autoridades educativas, al establecer que las escuelas «son de las comunidades».
«Inaceptable. La ADP entiende que allí donde se necesite un centro educativo para preservar la vida, hay que refugiarse en ella. Además, los centros educativos son de las comunidades», puntualizó Hidalgo.
Mientras, otros incluso se concentraron más que en el fondo, en la forma del comunicado, al señalarles hasta faltas ortográficas.
«Es una vergüenza que un comunicado oficial del Ministerio de Educación, por demás muy desafortunado, acuse los resaltados errores ortográficos y de sintaxis», criticó el abogado Julio Cury.
Fuente: Hoy