Entre protestas médicas, brote de cólera, casos de dengue, vigilancia del Covid-19 y alerta epidemiológica por la presencia de la chikungunya en la región, transcurrieron los primeros tres meses de este año.
Mientras el sistema sanitario mantiene importantes retos dirigidos a lograr mantener con baja incidencia el Covid-19 y otras enfermedades infecciosas transmisibles, así como frenar el impacto de las no transmisibles, que generan morbilidad y muertes, entre ellas la salud mental.
Así que ya concluida la crisis sanitaria generada por el Covid-19, cuyos indicadores este año han mantenido un sistemático declive, el sistema de salud debe enfocarse en el control de los males que más están impactando la población y presionan el presupuesto del Estado y el gasto de bolsillo.
Mientras el sistema sanitario mantiene importantes retos dirigidos a lograr mantener con baja incidencia el Covid-19 y otras enfermedades infecciosas transmisibles y de notificación obligatoria, así como frenar el impacto de las no transmisibles, que generan morbilidad y muertes, entre ellas la salud mental.
Así que ya concluida la crisis sanitaria generada por el Covid-19, cuyos indicadores este año han mantenido un sistemático declive, el sistema de salud debe enfocarse en el control de los males que más están impactando la población y presionan el presupuesto del Estado y el gasto de bolsillo.