Varios taxistas de Uber resultaron heridos y fueron apresados por agentes SWAT de la Policía Nacional, quienes lanzaron gases lacrimógenos y dispararon en contra de los choferes que se manifestaban por el alto costo de los combustibles.
El capitán del destacamento explicó que estos serían mantenidos bajo arresto durante 48 horas y que luego los iban a dejar en libertad si probaban que no habían cometido ningún delito.
Por otro lado, una de las personas heridas mostró a este medio las heridas en sus piernas y, adicionalmente, el equipo tuvo acceso a fotos y videos en los que se observan otros heridos.
“Nosotros somos un pequeño grupo que busca ser escuchado. Lo único que queremos es que se nos escuche, no que nos respondan con violencia”, dijo uno de los manifestantes, quien rehusó identificarse.