Eduardo Sanz Lovatón se perfila como uno de los nombres clave dentro del Partido Revolucionario Moderno (PRM) con un equipo que refleja una combinación estratégica de juventud, experiencia y prestigio. Con una trayectoria política sólida, Sanz Lovatón ha construido su liderazgo desde las bases del partido, consolidándose como una figura de peso en el panorama político dominicano.
A sus 47 años, su carrera pública incluye un desempeño destacado como director general de Aduanas durante el primer mandato de Luis Abinader, un cargo que lo posicionó como un referente en la gestión estatal. Su liderazgo no se limita a la capital, ya que ha logrado expandir su influencia por todo el territorio nacional, ganándose el respaldo de diversos sectores dentro y fuera del PRM.
Aunque no ha declarado oficialmente su intención de aspirar a la candidatura presidencial para 2028, su popularidad, su fortaleza política y los resultados favorables en encuestas lo colocan como una de las figuras más prometedoras del partido oficialista. Esta posición se refuerza con un equipo político que integra a figuras de alto nivel, dirigentes intermedios y de base, así como representantes municipales y legislativos.
Entre los nombres que conforman su núcleo de apoyo se encuentran Sigmund Freund Mena, es el delegado del PRM ante la Junta Central Electoral, miembro de la Dirección Ejecutiva y ministro de Administración Pública, Gloria Reyes es la directora del Programa Supérate y fue diputada PRM, Andrés Lugo viceministro Administrativo de la Presidencia y Secretario Nacional de Alianzas y Relaciones Partidarias, Rafael Barón Duluc senador PRM-La Altagracia, Elías Báez director general de la DIDA, tambié figuran: Yadhira Henríquez directora del Plan Social de la Presidencia., Agustín Burgos, diputado PRM-La Vega, Pedro Catrain, Ignacio Aracena, Vicente Sánchez Henríquez, Jorge Cavoli, Orlando Jorge Villegas, Abel Guzmán Then, Ángel Encarnación y Francis Almonte, entre otros líderes reconocidos del PRM.
Esta red de colaboradores, junto a su perfil político y su capacidad de conectar con diferentes sectores de la sociedad, lo posicionan como una pieza clave en el futuro del partido y, posiblemente, del país.