En un giro inesperado, se ha revelado que las tres mujeres detenidas bajo sospecha de estafa con tarjetas Supérate, en realidad fueron utilizadas como mulas por una red de estafadores. Estas mujeres, lejos de ser las perpetradoras del fraude, fueron engañadas y coaccionadas para participar en actividades delictivas, convirtiéndolas en lo que las autoridades describen como “mulillas” involuntarias del crimen organizado.
Según fuentes cercanas a la investigación, estas mujeres, todas ellas con circunstancias personales difíciles, fueron manipuladas con promesas falsas y amenazas para llevar a cabo transacciones ilegales con tarjetas de crédito Supérate. Se cree que la red criminal aprovechó su vulnerabilidad y necesidad económica para reclutarlas como intermediarias en el esquema de fraude.
Las mujeres que fueron apresadas ayer martes mientras realizaban una masiva compra de forma fraudulenta con tarjetas de Supérate en un supermercado del kilómetro 17 de la autopista Duarte
Las autoridades están intensificando los esfuerzos para identificar y desmantelar la red detrás de este esquema, mientras que se busca brindar apoyo y protección a las mujeres que fueron víctimas de esta manipulación. Se espera que este caso arroje luz sobre los métodos cada vez más sofisticados utilizados por los estafadores para reclutar “mulillas” y llevar a cabo actividades delictivas, destacando la importancia de la conciencia y la protección de los ciudadanos vulnerables frente al crimen organizado.